El padel es un juego de ritmo rápido que requiere que los jugadores se muevan con rapidez y piensen en sus pies.
Comencemos por los beneficios del padel
Tanto si eres nuevo en el padel como si eres un jugador experimentado, aquí tienes algunos de sus beneficios.
Es un deporte de interior No hay que preocuparse por el tiempo ni por el equipamiento exterior. Solo tienes que mover tu pala en la pista y ya estás listo.
Es un deporte individual. Puedes practicar por tu cuenta o con un amigo; no es necesario programar una pista con un club ni encontrar un compañero. Lo único que necesitas es una raqueta de padel.
Es una gran actividad cardiovascular. El movimiento constante y la repetición pueden hacer que tu corazón bombee.
Es una forma excelente de trabajar tus habilidades en la pista o en la red. Aprende a pivotar, a cruzar y a dejar caer los golpes para los jugadores avanzados.
¡Es divertido y social! Hay ligas y campamentos opcionales para los que quieran jugar en grupo o con otras personas.
El padel es un tipo de deporte de raqueta y pelota que se ha hecho cada vez más popular en los últimos años. Aunque hay varias versiones diferentes del juego, la premisa básica es la misma, ya que los jugadores utilizan una raqueta para golpear una pelota del tamaño de una pelota de tenis.
La ventaja del padel es que permite más acción y versatilidad que otros deportes de raqueta, como el raquetbol y el squash.
Además, el juego es relativamente nuevo y aún no se ha estandarizado, lo que significa que los jugadores individuales pueden encontrar su propio estilo y nicho en este deporte.
Aunque todavía se están explorando los beneficios exactos del padel, los expertos coinciden en que tiene el potencial de atraer a una gran variedad de público.
Cómo jugar al padel
Aunque puede parecerse un poco al tenis, hay algunas diferencias clave que hacen que este deporte sea único y emocionante de jugar.
En primer lugar, en este juego no existe el movimiento de fondo, por lo que los jugadores deben adaptarse a los rebotes de la pelota.
En segundo lugar, el padel se juega con una raqueta grande, lo que permite una gran variedad de golpes y ángulos.
Por último, hay una complejidad añadida en este juego, ya que los jugadores también pueden utilizar sus pies para añadir efecto o potencia a sus golpes de fondo.
Todos estos elementos suponen un nuevo nivel de desafío, lo que aumenta el atractivo de este nuevo y emocionante deporte.
La historia del padel
El pade es un deporte popular que se juega en una pista con una superficie de vidrio o plástico.
La pista está dividida en dos mitades por una red, y los jugadores utilizan raquetas para golpear una pelota por encima de la red y en el campo del adversario.
El juego es popular en los países de clima cálido, y a menudo lo juegan las parejas en parques y playas.
El padel es un deporte de relativamente bajo impacto, y también es un gran ejercicio cardiovascular.
Los que participan en este deporte suelen decir que mejoran la flexibilidad y el equilibrio.
Además, los que practican el padel suelen tener los músculos de los brazos más fuertes y el SNR.
Equipamiento necesario para el padel
El padel es un juego de ritmo rápido que pueden disfrutar jugadores de todas las edades y niveles de habilidad.
En el juego, las pelotas pueden golpearse por encima de la red, en el campo del adversario o en la propia red.
El juego se desarrolla mejor en pistas construidas sobre pilotes o con bordes elevados, para que las pelotas puedan rebotar más fácilmente en ellas.
Además, se recomienda una máscara adecuada y unas muñequeras. Sin estas piezas esenciales del equipo, el padel puede volverse rápidamente inseguro.
El padel es una forma estupenda de iniciarse en el tenis.
Es un juego sencillo al que puedes jugar en cualquier lugar, y se presenta de forma fácil de entender.
Llega la época del verano, sol, calor y queremos salir de vacaciones pronto para irnos a la plata a disfrutar de unas merecidas vacaciones junto a la familia.
Pero algo inesperado ocurre…
Tu o integrante de tu familia se resfría. Y la pregunta surge de inmediato: ¿Por qué nos resfriamos si es verano?
A medida que aumenta el calor, también aumenta el número de personas que se resfrían o tienen gripe. En esta publicación hablaremos de las razones por las que nos resfriamos en verano, así como de algunas formas de prevenirlos.
Calor y humedad
Una serie de factores están implicados en el mayor riesgo de contraer un resfrío. Uno de los más importantes es el cambio de temperatura y los niveles de humedad.
Cuando el aire es más cálido y húmedo, las bacterias y los virus empiezan a multiplicarse y prosperar rápidamente. Esto es lo que lleva al desarrollo de un resfriado: el sistema inmunitario intenta combatir la infección, pero no está equipado para manejar las condiciones.
Además, el clima más cálido suele significar que se pasa más tiempo al aire libre, lo que supone una mayor oportunidad de exposición a los virus transmitidos por el aire.
Por último, el efecto tranquilizador del calor también puede hacernos más susceptibles de sentirnos mal.
En resumen, los resfriados de verano son principalmente el resultado de las temperaturas más cálidas y el aumento de la humedad.
Las temidas infecciones virales
Las infecciones virales son la causa más común de los resfriados en verano, y pueden estar causadas por diversos virus, como los rinovirus, el virus respiratorio sincicial (VRS) y los virus de la gripe.
Las personas con sistemas inmunitarios vulnerables pueden ser más propensas a desarrollar síntomas de una infección si no están sanas o bien descansadas. Además, las personas con problemas socioeconómicos o sin hogar pueden tener un mayor riesgo de contraer estas infecciones virales debido a las malas prácticas de higiene, la falta de acceso al agua potable y el acceso a superficies como los aseos públicos, que suelen ser poco higiénicos.
Independientemente de cómo se enferme la gente durante la temporada de verano, es importante mantenerse hidratado, llevar muchas capas de ropa y evitar exponerse a personas que estén tosiendo o estornudando.
Las bacterias en las temperaturas cálidas
El resfriado, o infección viral, suele estar causado por unos gérmenes llamados rinovirus.
Estos virus necesitan un clima cálido para multiplicarse, y prosperan en condiciones húmedas y cálidas. Esto significa que los resfriados son más frecuentes durante el verano, cuando la gente está al aire libre en climas más cálidos.
Además del calor y la humedad, el otro factor que interviene en la propagación de los resfriados es la presencia de otros gérmenes. Los miembros de una misma familia o clase de bacterias suelen compartir rasgos similares, lo que significa que es más probable que se infecten unos a otros cuando están cerca.
Estos virus necesitan un clima cálido para multiplicarse, y prosperan en condiciones húmedas y cálidas.
Por eso los resfriados son tan contagiosos, y por eso siempre es fundamental tomar precauciones para no enfermar. Evitando los lugares concurridos y aplicando buenas prácticas de higiene de manos, puedes ayudar a protegerte de los resfriados, incluso en pleno verano.
Poros de la piel abiertos
Puede que el invierno sea la estación de la tos y los resfriados, pero el verano también trae su parte de resaca.
¿A qué se debe esto? La respuesta está en los poros de la piel.
La primavera y el verano son épocas de mayor actividad para el sistema inmunitario humano, ya que el tiempo es cálido y hay más gente al aire libre. Esto hace que la piel sea vulnerable a las infecciones, y el resultado es el resfriado común.
Los virus del resfriado, como el usual, entran en el cuerpo a través de pequeños cortes o arañazos en la piel. Los virus viajan entonces por el torrente sanguíneo, atacando las células respiratorias por el camino.
El resultado es un resfriado.
Sin embargo, también hay otros factores en juego.
Una posibilidad es que la gente tiende a resfriarse más a menudo en verano debido al clima más cálido.
Otra posibilidad es que la gente tiende a disfrutar más de un resfriado que de una fiebre o un dolor de cuerpo, porque el resfriado se siente mucho peor.
O podría ser que la gente simplemente se resfría más en verano, independientemente de las demás variables.
Puede que nunca se entienda del todo la razón de los resfriados en verano, pero una cosa es segura: todos tenemos que cuidarnos mejor en el verano.
Por eso debemos prestar atención al entorno en el que vivimos. Tomando algunas medidas sencillas (y no tan sencillas), podemos contribuir a ser más respetuosas con las altas temperaturas.
En Mueve Salud tenemos un Panel Respiratorio que, en 30 minutos, te dirá si tienes Adenovirus, Virus Sincicial o Influenza A o B
¿Cuál es la diferencia entre un virus, una bacteria y un hongo? ¿Por qué es importante? ¿Y cómo afecta a tu salud? En este artículo, hablaremos de algunos tipos comunes de virus, bacterias y hongos y de cómo afectan a tu salud. También proporcionaré información sobre cómo prevenir, diagnosticar y tratar estas infecciones usuales. ¡Mantente saludable!
Cuáles son los distintos tipos de adenovirus que pueden causar enfermedades
Hay muchos tipos diferentes de adenovirus, y cada uno puede causar un tipo diferente de enfermedad. En general, dos de los adenovirus más comunes son el virus respiratorio sincicial (VRS) y la gripe A o B.
El VRS causa principalmente síntomas similares a los del resfriado, mientras que la gripe puede causar fiebre, dolores y cefalea. Ambos virus pueden provocar neumonía, pero el VRS tiene más probabilidades de causar una enfermedad más grave.
Otro tipo común de adenovirus es el virus asociado al adeno (AAV). El AAV puede causar una enfermedad de leve a moderada en los adultos y una enfermedad cutánea y sistémica en los niños. Suele transmitirse de persona a persona a través de un contacto estrecho.
Cómo se transmiten los adenovirus y cómo pueden evitarse
Los ADENOVIRUS son virus monocatenarios con envoltura que pueden causar infecciones respiratorias tanto en humanos como en animales.
Los adenovirus tienen la enzima anubis luciferasa (AL) en su superficie, lo que les permite infectar células y replicarse. Los virus suelen propagarse por contacto con fluidos corporales, como la saliva, la orina y las heces. Otra vía de transmisión es a través de las picaduras de garrapatas. En raras ocasiones, los virus pueden transmitirse de persona a persona a través de gotitas en el aire. Hay muchas cepas diferentes de adenovirus, y cada una tiene sus propios síntomas específicos.
Algunas provocan congestión nasal, mientras que otras pueden causar dolor de garganta o infecciones respiratorias. La mejor forma de prevenir los adenovirus es practicar una buena higiene y evitar el contacto con personas enfermas. Cuando te expongas al adenovirus, es importante que actúes rápidamente evitando el contacto con otras personas y lavándote las manos con frecuencia.
Síntomas de una infección viral y tratamiento
Las infecciones virales están causadas por virus, que son pequeños organismos que no pueden verse a simple vista.
Los virus entran en el cuerpo a través de roturas en la piel, como arañazos o mordeduras. Una vez dentro, los virus empiezan a invadir las células del cuerpo y a multiplicarse.
Según el tipo de virus, los síntomas pueden ser leves o graves y pueden durar hasta una semana. Los síntomas más comunes de las infecciones virales son estornudos, tos, expectoración de mucosidad, secreción nasal, dolores de cabeza, dolores corporales, fatiga, fiebre, sensación de malestar.
Formas más comunes de gripe y su tratamiento
Cualquiera que haya tenido la gripe puede decirte que puede ser agotador.
Puedes sentirte febril, tener músculos adoloridos y experimentar congestión nasal y estornudos.
Aunque normalmente sólo te duele y te sientes mal durante unos días, la gripe a veces puede provocar complicaciones más graves, como la neumonía o incluso la muerte. Entonces, ¿cuáles son las formas más comunes de gripe y cómo se pueden tratar?
La gripe está causada por un virus, y hay muchas cepas diferentes que circulan cada año. Estas cepas pueden variar en gravedad y tiempo de aparición.
Las formas más comunes de gripe son la gripe A y la gripe B. Ambos virus provocan síntomas respiratorios, como tos, congestión y estornudos. Sin embargo, la gripe A suele causar síntomas más graves.
Para obtener los mejores resultados del tratamiento, es importante saber cuándo hay que buscar atención médica para los síntomas de la gripe.
Los síntomas como la fiebre, la tos, el dolor de garganta o los vómitos deben provocar una visita al médico. Tanto la gripe A como la B pueden provocar complicaciones como la neumonía o incluso la muerte. Así que si te sientes mal, asegúrate de acudir al médico de inmediato.
Protegernos de la gripe y de su contagio
La gripe es una infección viral muy contagiosa que puede provocar síntomas como fiebre alta, tos, dolor de garganta y secreción o congestión nasal. Aunque la gripe puede ser un grave riesgo para la salud, también puede transmitirse fácilmente de persona a persona. Por tanto, es imprescindible que tomes medidas para protegerte de la gripe y de su transmisión. He aquí algunos consejos:
En primer lugar, es importante que practiques una buena higiene lavándote las manos con frecuencia y a fondo. También debes evitar tocarte los ojos, la nariz y la boca con las manos sin lavar. Utilizar jabones y toallitas antibacterianas es también una buena forma de evitar la propagación de gérmenes.
También debes asegurarte de descansar lo suficiente y mantenerte hidratado. Descansar lo suficiente ayuda a tu cuerpo a combatir la gripe, mientras que beber mucha agua te ayuda a mantenerte bien hidratado durante el transcurso de la enfermedad.
Si estás enfermo y estás cerca de otras personas, se recomienda que mantengas las puertas cerradas y evites estar cerca de personas que estén tosiendo o estornudando, o podrías acabar infectándolas.
Por último, si tienes previsto salir en público, es mejor que lleves la mascarilla/respirador/N95 y que te cubras la tos/estornudos con un pañuelo de papel. Tomando estas sencillas medidas, puedes ayudar a protegerte de la gripe y de su transmisión.
Los adenovirus son un grupo de pequeños virus de ADN de doble cadena que son muy contagiosos y suelen causar infecciones respiratorias. Pueden contagiarse a través del contacto con las secreciones respiratorias, como los estornudos y la tos.
Los individuos no infectados no suelen desarrollar síntomas, pero las personas infectadas pueden experimentar tos, fiebre alta y dolor de cabeza. Los adenovirus también se consideran una causa de gastroenteritis. Las ventajas de los adenovirus sobre otros virus son su capacidad de propagación rápida, su capacidad de causar una amplia gama de síntomas y su alta infectividad.
Sin embargo, también son muy resistentes a muchos antivirales y pueden causar discapacidades de por vida y la muerte. Dada su propensión a causar graves problemas de salud, los adenovirus deben discutirse con los pacientes y las familias que corren el riesgo de contraerlos.
Los adenovirus, los virus de la gripe A y B y el virus sincicial pueden causar infecciones respiratorias. Si tu, tu hijo o hija muestra signos de infección respiratoria, es importante que lo lleves al médico lo antes posible. Hay diferentes tipos de tratamientos disponibles para ayudar a curar la infección de tu hijo y ayudarle a recuperar la salud lo antes posible.
En Mueve Salud contamos con un examen rápido. En 30 minutos puedes saber si padeces alguna enfermedad como Adenovirus, Virus Sincicial e Influenza A o B.
Aunque se trata de dos lesiones musculares similares, lo cierto es que existen diferencias entre las características básicas de ambas. Tanto la contractura como el desgarro se producen en los músculos, ambas originan un fuerte dolor a quien las padece y malestar general. Los síntomas de la rotura y la contractura muscular son muy similares: una sensación de que la vaina de fibras se “encoge”, a la vez de que quema, y, normalmente, no puedes seguir corriendo. Pero pueden dar lugar a equivocaciones.
La contractura es una contracción mantenida en el tiempo sin ruptura del tejido muscular. En cambio, el desgarro es la ruptura de pequeñas o grandes fibras musculares.
¿CUÁL ES LA DIFERENCIA?
En el caso de la contractura, el músculo simplemente se encoge, se forma una bola, pero no hay rotura fibrilar. En la contractura muscular se produce una inflamación y una rigidez en el músculo, creando la sensación de tener un globo dentro del músculo. Además de estar totalmente rígida, la zona afectada está dolorida.
Existen diversas causas: el sobreentrenamiento con pausas insuficientes, un inadecuado calentamiento al iniciar una actividad, poca flexibilidad muscular, entre otras. Esto sumado al estrés o a un evento particular de tensión emocional pueden gatillar una contractura. Si es pesquisada y tratada a tiempo generalmente es de rápida evolución. El calor local, el masaje y el reposo deportivo del área afectada son las recomendaciones iniciales. Con estas medidas en aproximadamente cinco a siete días debiese pasar.
Si la contractura es muy pronunciada, tal vez necesites cuatro o seis días de reposo, para que el kinesiólogo pueda empezar a trabajar sobre ella, ya que en un primer momento, si la inflamación es muy grande, te dolería mucho, y por ello, en casos así, es mejor dejar unas horas para que dicha inflamación se rebaje.
¿Y el desgarro?
El desgarro muscular es mucho más severo que la contractura porque provoca la rotura de las fibras que componen los músculos. En función del tamaño de estas fibras, el desgarre puede ocasionar más o menos daños.
Las fibras de los músculos se agrupan en paquetes, envueltos por una capa fina. Si esta capa o si una de las fibras musculares se rompe, esto provoca un desgarre.
El desgarro suele estar causado por movimientos muy fuertes y precipitados. Generalmente, se produce entre deportistas por razones del esfuerzo muscular constante que realizan. Este tipo de lesiones es mucho más severo que una contractura y, en el momento de las pruebas realizadas por el médico y/o kinesiólogo especialista, es fácil diagnosticarlo.
El desgarro habitualmente se manifiesta durante 21 días y es un proceso que presenta varias fases. El desgarro provoca fuertes dolores y una inmovilidad total de la zona afectada. En estos casos se aconseja aplicar mucho hielo sobre la zona afectada para calmar el dolor provocado por la rotura de la fibra muscular.
Atención de kinesiología con FONASA e Isapre Fundación en nuestro gimnasio de terapéutico.
Consultas y toma de horas al teléfono +56226416833 o +56226413735
La Kinesiología como la ciencia del movimiento tiene una importante injerencia en la intervención del área neurológica, desde la prevención hasta la rehabilitación. La kinesiología radica en una serie de técnicas físicas, las cuales tienen como finalidad revertir los deterioros producidos por una serie de patologías que afectan al sistema nervioso. Nuestros profesionales, con formación y especialización en el área, tienen como principal objetivo con el paciente lograr la máxima independencia funcional en las actividades de la vida diaria.
Horarios de Atención
Lunes a Viernes 08.00 a 20.00 hrs En Mueve Salud, los especialistas en Kinesiología podrán ayudarte a:
Evaluación y atención de paciente pediátrico, adulto y adulto mayor
Aspiración de secreciones y Nebulización
Asistencia y asesoría de VMNI
Atención de kinesiología traumatológica y neurología.